El intendente de Escobar envió al Concejo Deliberante un proyecto para dejar sin efecto la ordenanza que había aprobado en diciembre pasado la instalación de un complejo comercial y recreativo en Ingeniero Maschwitz, que incluía una sala de bingo. La medida llega luego de que la Justicia provincial ratificara una cautelar que frenó el emprendimiento por irregularidades en su aprobación.
El Ejecutivo municipal de Ariel Sujarchuk elevó al Honorable Concejo Deliberante el pedido de derogación de la Ordenanza N.º 6350/24, que en diciembre de 2024 había habilitado la creación de un desarrollo recreativo y comercial en Ingeniero Maschwitz. El proyecto contemplaba la instalación de una sala de juegos de azar, vinculada al traslado del Bingo Ramallo, junto con locales comerciales y un hotel.
La decisión de Sujarchuk se da tras una serie de fallos judiciales adversos. En julio, el Juzgado en lo Contencioso Administrativo N.º 1 de Zárate-Campana, a cargo de la jueza Mónica Ayerbe, dictó una medida cautelar que suspendió los efectos de la ordenanza. La magistrada señaló que el Municipio no había cumplido con los pasos legales exigidos para modificar el uso del suelo, ni había presentado un Estudio de Impacto Ambiental ni convocado a una audiencia pública, como establece la normativa vigente.
Semanas más tarde, la Cámara de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo de San Nicolás confirmó la medida, con los jueces Marcelo Schreginger y Damián Cebey ratificando que la ordenanza era inválida al alterar la zonificación sin la convalidación provincial requerida por el Decreto Ley 8912/77. Incluso la Suprema Corte de Justicia bonaerense terminó avalando el fallo, al sostener que “la autonomía municipal no exime de respetar las normas de coordinación provincial y ambiental”.
El terreno involucrado en el proyecto, identificado con las parcelas 3557-a, 3561-a y 3567, está ubicado en una zona catalogada como “Residencial Exclusiva 1 (Re1)”. Allí, la construcción de una sala de juegos o un centro comercial requería de un proceso especial de readecuación urbana que, según los jueces, no se había cumplido.
El proyecto había despertado fuerte rechazo entre los vecinos de Maschwitz, quienes denunciaron que el emprendimiento se aprobó de manera exprés y sin participación ciudadana. También plantearon que la instalación de un bingo afectaría la identidad residencial del barrio. Detrás del plan, se mencionaba la participación de empresarios vinculados al juego, entre ellos Daniel Angelici.
Ante ese escenario judicial y social, el intendente decidió retroceder y propuso la derogación formal de la norma que impulsó su propio Ejecutivo. La iniciativa será tratada “sobre tablas” en la próxima sesión del Concejo Deliberante, prevista para el 12 de noviembre.
Con esta decisión, el municipio busca cerrar un conflicto que se prolongó por meses y que puso en tensión la planificación urbana, el rol de la Justicia y la relación entre los gobiernos locales y la Provincia en materia de ordenamiento territorial. Mientras tanto, el freno judicial sigue vigente y el proyecto del bingo en Maschwitz quedó, por ahora, descartado.






























